
La genómica
Es la ciencia que estudia el genoma, es decir, todo el ADN que compone nuestras células. El ADN es como un gran libro de instrucciones que determina cómo crecemos, cómo funcionan nuestras células y cuál es nuestro riesgo de desarrollar ciertas enfermedades.
Con la genómica podemos identificar variantes genéticas, algunas responsables de enfermedades hereditarias o que afectan cómo respondemos a medicamentos.
El avance en el estudio del genoma humano ha abierto la puerta a la medicina personalizada, donde los tratamientos se adaptan según la información genética de cada persona. Esto permite:
- Diagnosticar enfermedades de manera más precisa y temprana.
- Diseñar tratamientos personalizados adaptados al perfil molecular de cada paciente.
- Desarrollar estrategias preventivas basadas en el conocimiento del riesgo individual.
- Entender mejor la interacción entre genes, ambiente y estilo de vida.
En conjunto, estas ciencias nos acercan a la Medicina de Precisión, que mejora la salud y calidad de vida de las personas.
La epigenómica
Estudia las modificaciones químicas en el ADN o en las proteínas que lo rodean, que regulan la expresión de los genes sin cambiar la secuencia del ADN. Estas modificaciones actúan como “interruptores” que pueden activar o desactivar genes, y son influenciadas por factores como la edad, la dieta, el estrés o la exposición a contaminantes.
La epigenómica es fundamental para entender cómo el ambiente y el estilo de vida pueden afectar nuestra salud y cómo se desarrollan ciertas enfermedades, como el cáncer o trastornos metabólicos. Además, estas modificaciones son reversibles, lo que abre la puerta a tratamientos que las puedan modificar.
